LA NOVELA DE 1939 A 1975. CAMILO JOSÉ CELA, MIGUEL
DELIBES
La Guerra Civil (1936-39) constituye una catástrofe a todos los niveles. A nivel
literario, el esplendor de la Edad de Plata desembocará en el exilio, la muerte, la
persecución y la censura política y religiosa. Al finalizar esta, desaparecieron casi
todos los tipos de novela que se estaban publicando antes.
LOS AÑOS 40. NOVELA IDEALISTA Y REALISMO EXISTENCIAL
La novela idealista propagandista
Durante los primeros años del franquismo aparecen bastantes novelas
propagandistas de sus valores ideológicos: Dios, patria y familia. Autores
falangistas como García Serrano (“La fiel infantería”) o Agustín de Foxá (“Madrid
de Corte a Checa”).
El realismo existencial
Tema. Reflejan el ambiente de posguerra y la vida cotidiana del país con
amargo realismo.
Técnica y estilo. Son “novelas de aprendizaje” en las que predomina la
narración autobiográfica. Emplean un lenguaje poético y a la vez popular.
Novelas. Además de “La sombra del ciprés es alargada” de Miguel Delibes y la
“Familia de Pascual Duarte” de Camilo José Cela, destacan “Javier Mariño.
Historia de una conversación” de Torrente Ballester y “Nada” de Carmen Laforet.
LOS AÑOS 50. LA NOVELA DEL REALISMO SOCIAL
Autores que comparten su actitud combativa y transformadora, buscan un
cambio, tomaron conciencia de que los problemas íntimos tenían origen en la
realidad social.
Temas
Ofrece un punto de vista crítico. Desplaza el foco de lo individual a lo colectivo:
la ciudad, la vida rural, las relaciones laborales, etc.
Técnica y estilo
Ganan protagonismo los “personajes colectivos”. Introduce el objetivismo;
abundan los diálogos y utiliza un lenguaje sencillo. Dos corrientes:
- Realismo objetivo: inaugurado con “La colmena” de Cela. Aunque la obra
más representativa es “El Jarama” de Rafael Sánchez Ferlosio, en la que
reconstruye once horas de vida de un grupo de jóvenes a orillas del río
Jarama, a través de sus diálogos.
- Realismo crítico: destacan los relatos de Igancio Aldecoa; “El camino” y “Las
ratas” de Delibes; la trilogía “Los gozos y las sombras” de Torrente Ballester.
LOS AÑOS 60-70. LA NOVELA EXPERIMENTAL
DELIBES
La Guerra Civil (1936-39) constituye una catástrofe a todos los niveles. A nivel
literario, el esplendor de la Edad de Plata desembocará en el exilio, la muerte, la
persecución y la censura política y religiosa. Al finalizar esta, desaparecieron casi
todos los tipos de novela que se estaban publicando antes.
LOS AÑOS 40. NOVELA IDEALISTA Y REALISMO EXISTENCIAL
La novela idealista propagandista
Durante los primeros años del franquismo aparecen bastantes novelas
propagandistas de sus valores ideológicos: Dios, patria y familia. Autores
falangistas como García Serrano (“La fiel infantería”) o Agustín de Foxá (“Madrid
de Corte a Checa”).
El realismo existencial
Tema. Reflejan el ambiente de posguerra y la vida cotidiana del país con
amargo realismo.
Técnica y estilo. Son “novelas de aprendizaje” en las que predomina la
narración autobiográfica. Emplean un lenguaje poético y a la vez popular.
Novelas. Además de “La sombra del ciprés es alargada” de Miguel Delibes y la
“Familia de Pascual Duarte” de Camilo José Cela, destacan “Javier Mariño.
Historia de una conversación” de Torrente Ballester y “Nada” de Carmen Laforet.
LOS AÑOS 50. LA NOVELA DEL REALISMO SOCIAL
Autores que comparten su actitud combativa y transformadora, buscan un
cambio, tomaron conciencia de que los problemas íntimos tenían origen en la
realidad social.
Temas
Ofrece un punto de vista crítico. Desplaza el foco de lo individual a lo colectivo:
la ciudad, la vida rural, las relaciones laborales, etc.
Técnica y estilo
Ganan protagonismo los “personajes colectivos”. Introduce el objetivismo;
abundan los diálogos y utiliza un lenguaje sencillo. Dos corrientes:
- Realismo objetivo: inaugurado con “La colmena” de Cela. Aunque la obra
más representativa es “El Jarama” de Rafael Sánchez Ferlosio, en la que
reconstruye once horas de vida de un grupo de jóvenes a orillas del río
Jarama, a través de sus diálogos.
- Realismo crítico: destacan los relatos de Igancio Aldecoa; “El camino” y “Las
ratas” de Delibes; la trilogía “Los gozos y las sombras” de Torrente Ballester.
LOS AÑOS 60-70. LA NOVELA EXPERIMENTAL
