TEMA 9. 25. El aumento de las fuerzas de oposición: Anarquismo y Socialismo.
Las abusivas condiciones de trabajo en el inicio de la industrialización y la miserable situación de
los jornaleros agrícolas en la mitad sur de España, constituyeron la base del apoyo popular al
movimiento obrero. El ludismo (destrucción de las máquinas) y la creación de Sociedades de
Socorros Mutuos fueron los primeros pasos de este movimiento, que pronto encontró en la huelga su
principal instrumento de presión. Sus primeros intentos de organización estuvieron en torno al
socialismo utópico y al republicanismo, aunque pronto sucumbieron ante el empuje del anarquismo y
comunismo.
LA AIT EN ESPAÑA
La Asociación Internacional de Trabajadores (Primera Internacional o AIT) se creó en 1864 en
defensa de la emancipación de la clase obrera y agrupaba a diversas asociaciones tanto socialistas
como anarquistas. Con el triunfo de la revolución de 1868, la AIT envió a España a Fanelli para crear
los primeros núcleos de afiliados, que participaron al igual que Fanelli de la ideología anarquista
definida por Bakunin y que suponía la supresión del Estado, la colectivización de la propiedad y el
apoliticismo. La organización se expandió por toda España durante el Sexenio, especialmente en
Madrid, Barcelona, Levante y Andalucía. El primer congreso de la Federación Regional Española
(FRE) se celebró en 1870. Allí se adoptaron acuerdos en la línea anarquista.
La llegada en 1871 de Paul Lafargue (yerno de Karl Marx) a Madrid, impulsó la creación de un
grupo a favor del marxismo que fueron expulsados de la FRE y constituyeron la llamada Nueva
Federación Madrileña de corte socialista.
EVOLUCIÓN DEL ANARQUISMO
En 1874 la FRE fue ilegalizada y cambió su denominación a Federación de Trabajadores de la
Región Española (FTRE) con fuerte influencia en Cataluña y Andalucía y que optó por la vía violenta
contra el Estado, la burguesía y la Iglesia. El aumento de atentados llevó al anarquismo a la división
entre sus defensores y los que propugnaban una acción de masas (anarcosindicalismo). Esta
tendencia formó asociaciones como Solidaridad Obrera (1907) o la Confederación Nacional del
Trabajo (CNT) en 1910, defensora de la huelga general revolucionaria. El sindicato sufrió notables
altibajos y fue prohibido hasta 1914. A partir de 1915 creció de forma notable y celebró dos
congresos (Sants en Barcelona y La Comedia en Madrid) donde reafirmó su apoliticismo y la
necesidad de la negociación directa entre obreros y patronos sin intervención del Estado.
EVOLUCIÓN DEL SOCIALISMO
En 1876, tras la desaparición de la AIT, los miembros de la Nueva Federación Madrileña
decidieron constituir en 1879 el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) entre otros por Pablo
Iglesias. Era un partido obrerista y partidario de la revolución social, que incluía derechos
fundamentales como el de asociación, reunión y manifestación laborales (reducción de la jornada
laboral y prohibición del trabajo infantil). El partido creció lentamente por toda España y en especial
en Madrid, País Vasco, Asturias y Málaga, mientras que tuvo más dificultades en las zonas
dominadas por el anarcosindicalismo (Cataluña, Levante, Andalucía). En 1889, con la fundación de
la Segunda Internacional se introdujo en España la Fiesta del Trabajo (1 de mayo). En 1888 el
partido fundó un sindicato, la Unión General de Trabajadores (UGT) que no se declaró en principio
marxista, dando libertad de militancia a sus afiliados, aunque sus dirigentes pertenecieran al Partido
Socialista. Su línea de actuación fue mucho más moderada que la del anarcosindicalismo. En 1910,
el PSOE acudió a las elecciones en coalición con los republicanos y Pablo Iglesias obtuvo la primera
Las abusivas condiciones de trabajo en el inicio de la industrialización y la miserable situación de
los jornaleros agrícolas en la mitad sur de España, constituyeron la base del apoyo popular al
movimiento obrero. El ludismo (destrucción de las máquinas) y la creación de Sociedades de
Socorros Mutuos fueron los primeros pasos de este movimiento, que pronto encontró en la huelga su
principal instrumento de presión. Sus primeros intentos de organización estuvieron en torno al
socialismo utópico y al republicanismo, aunque pronto sucumbieron ante el empuje del anarquismo y
comunismo.
LA AIT EN ESPAÑA
La Asociación Internacional de Trabajadores (Primera Internacional o AIT) se creó en 1864 en
defensa de la emancipación de la clase obrera y agrupaba a diversas asociaciones tanto socialistas
como anarquistas. Con el triunfo de la revolución de 1868, la AIT envió a España a Fanelli para crear
los primeros núcleos de afiliados, que participaron al igual que Fanelli de la ideología anarquista
definida por Bakunin y que suponía la supresión del Estado, la colectivización de la propiedad y el
apoliticismo. La organización se expandió por toda España durante el Sexenio, especialmente en
Madrid, Barcelona, Levante y Andalucía. El primer congreso de la Federación Regional Española
(FRE) se celebró en 1870. Allí se adoptaron acuerdos en la línea anarquista.
La llegada en 1871 de Paul Lafargue (yerno de Karl Marx) a Madrid, impulsó la creación de un
grupo a favor del marxismo que fueron expulsados de la FRE y constituyeron la llamada Nueva
Federación Madrileña de corte socialista.
EVOLUCIÓN DEL ANARQUISMO
En 1874 la FRE fue ilegalizada y cambió su denominación a Federación de Trabajadores de la
Región Española (FTRE) con fuerte influencia en Cataluña y Andalucía y que optó por la vía violenta
contra el Estado, la burguesía y la Iglesia. El aumento de atentados llevó al anarquismo a la división
entre sus defensores y los que propugnaban una acción de masas (anarcosindicalismo). Esta
tendencia formó asociaciones como Solidaridad Obrera (1907) o la Confederación Nacional del
Trabajo (CNT) en 1910, defensora de la huelga general revolucionaria. El sindicato sufrió notables
altibajos y fue prohibido hasta 1914. A partir de 1915 creció de forma notable y celebró dos
congresos (Sants en Barcelona y La Comedia en Madrid) donde reafirmó su apoliticismo y la
necesidad de la negociación directa entre obreros y patronos sin intervención del Estado.
EVOLUCIÓN DEL SOCIALISMO
En 1876, tras la desaparición de la AIT, los miembros de la Nueva Federación Madrileña
decidieron constituir en 1879 el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) entre otros por Pablo
Iglesias. Era un partido obrerista y partidario de la revolución social, que incluía derechos
fundamentales como el de asociación, reunión y manifestación laborales (reducción de la jornada
laboral y prohibición del trabajo infantil). El partido creció lentamente por toda España y en especial
en Madrid, País Vasco, Asturias y Málaga, mientras que tuvo más dificultades en las zonas
dominadas por el anarcosindicalismo (Cataluña, Levante, Andalucía). En 1889, con la fundación de
la Segunda Internacional se introdujo en España la Fiesta del Trabajo (1 de mayo). En 1888 el
partido fundó un sindicato, la Unión General de Trabajadores (UGT) que no se declaró en principio
marxista, dando libertad de militancia a sus afiliados, aunque sus dirigentes pertenecieran al Partido
Socialista. Su línea de actuación fue mucho más moderada que la del anarcosindicalismo. En 1910,
el PSOE acudió a las elecciones en coalición con los republicanos y Pablo Iglesias obtuvo la primera
