RESUMEN
“CÓMO ESCUCHAR LA MÚSICA”
Aaron Copland
“Música de películas”
Al igual que el ballet o el teatro, entre otros, podríamos definir la música que
acostumbramos a escuchar en las películas como un nuevo tipo de género dramático.
Son muchas las cuestiones que surgen en relación a este tipo de música y su influencia
sobre las escenas en las que tiene cabida. Aunque indudablemente, el acompañamiento
musical resulta ser un pilar fundamental en cualquier producción cinematográfica, en
numerosas ocasiones pasa desapercibido por el espectador, quien permanece inmerso
ante el estímulo visual que la pantalla le ofrece. Pese a quedar en un segundo plano, la
música sigue teniendo una gran importancia en el mundo del cine, pudiendo mermar el
valor de la película en caso de no haber sido producida y trabajada de forma correcta.
El productor de la obra cinematográfica en cuestión, se centrará en la parte musical
desde una perspectiva primordialmente funcional, recurriendo a ésta en múltiples
ocasiones con el objetivo de compensar posibles errores que el filme pueda presentar,
como, por ejemplo, un fragmento mal actuado.
Si nos detenemos a hacer un análisis más exhaustivo sobre la música en el cine,
comprobaremos que no solo tienen cabida las grandes composiciones instrumentales,
siendo habitual la introducción de música con un carácter más utilitario, como puede
ser el caso de aquella procedente de la calle cuyo origen está alejado de la escena.
El compositor se apoya en diversas disciplinas que le permitirán obtener un mejor
resultado como, por ejemplo, en la edición de las grabaciones, que supondrá una mayor
sincronización a la hora de incorporar la música. De igual manera, será fundamental un
correcto empleo de los planos orquestales, ya que en determinadas escenas una
melodía excesivamente llamativa puede convertirse en una distracción para el
espectador.
La composición de música destinada al mundo cinematográfico consiste en un proceso
realmente complejo, en el que es necesario conocer las funciones que va a tener dicha
música dependiendo de las necesidades que presente cada escena. En aquellos casos en
los que la obra musical no esté escrita, será de gran utilidad para el compositor conocer
“CÓMO ESCUCHAR LA MÚSICA”
Aaron Copland
“Música de películas”
Al igual que el ballet o el teatro, entre otros, podríamos definir la música que
acostumbramos a escuchar en las películas como un nuevo tipo de género dramático.
Son muchas las cuestiones que surgen en relación a este tipo de música y su influencia
sobre las escenas en las que tiene cabida. Aunque indudablemente, el acompañamiento
musical resulta ser un pilar fundamental en cualquier producción cinematográfica, en
numerosas ocasiones pasa desapercibido por el espectador, quien permanece inmerso
ante el estímulo visual que la pantalla le ofrece. Pese a quedar en un segundo plano, la
música sigue teniendo una gran importancia en el mundo del cine, pudiendo mermar el
valor de la película en caso de no haber sido producida y trabajada de forma correcta.
El productor de la obra cinematográfica en cuestión, se centrará en la parte musical
desde una perspectiva primordialmente funcional, recurriendo a ésta en múltiples
ocasiones con el objetivo de compensar posibles errores que el filme pueda presentar,
como, por ejemplo, un fragmento mal actuado.
Si nos detenemos a hacer un análisis más exhaustivo sobre la música en el cine,
comprobaremos que no solo tienen cabida las grandes composiciones instrumentales,
siendo habitual la introducción de música con un carácter más utilitario, como puede
ser el caso de aquella procedente de la calle cuyo origen está alejado de la escena.
El compositor se apoya en diversas disciplinas que le permitirán obtener un mejor
resultado como, por ejemplo, en la edición de las grabaciones, que supondrá una mayor
sincronización a la hora de incorporar la música. De igual manera, será fundamental un
correcto empleo de los planos orquestales, ya que en determinadas escenas una
melodía excesivamente llamativa puede convertirse en una distracción para el
espectador.
La composición de música destinada al mundo cinematográfico consiste en un proceso
realmente complejo, en el que es necesario conocer las funciones que va a tener dicha
música dependiendo de las necesidades que presente cada escena. En aquellos casos en
los que la obra musical no esté escrita, será de gran utilidad para el compositor conocer