Tema 10: La consolidación y crisis de la dictadura franquista (1959-1975)
Tras transcurrir el periodo conocido como primer franquismo (1939-1959), se inicia la etapa
conocida como segundo franquismo tras llevarse a cabo el Plan de Estabilización de 1959. El
objetivo de dicho plan era liberalizar la economía y conseguir una integración con la
economía europea. A pesar de ello, en los años 60 se produjo un crecimiento económico
impresionante a nivel nacional debido a una serie de factores.
Primeramente, se dió la aparición del fenómeno turístico europeo, debido al buen tiempo y a
la devaluación de la peseta, que supuso un impulso económico muy importante para los
sectores de la construcción, la hostelería y, en general, para la demanda del consumo
derivando todo ello a que España se convirtiera en un país con un gran sector terciario.
En segundo lugar, ante la falta de expectativas de crecimiento en el sector agrario y la crisis
de los años 60, se produjo la apertura de relaciones diplomáticas con Europa produciendo una
oleada de emigrantes hacia países industrializados como Alemania, Francia o Bélgica. A su
vez, debido a que el gobierno facilitó la inversión extranjera y, teniendo en cuenta que las
empresas buscaban una mano de obra barata, un mercado con posibilidades de expansión
ilimitada, se produjo un crecimiento en cuanto a las inversiones extranjeras.
Debido a todo este crecimiento económico y con el fin de poder controlarlo, se crearon tres
Planes de Desarrollo, el de 1964-67, 1968-71 y 1972-75, siendo este último abandonado
debido a la crisis del petróleo de 1973. El crecimiento económico también derivó en un
cambio social y de vida espectacular.
En cuanto a cambios sociales, la emigración del campo a la ciudad hizo crecer las áreas
urbanas derivando en la aparición de cinturones de chabolismo que no se pudieron erradicar
ante la falta de una reforma de los planes urbanísticos. Por otra parte, el impacto del turismo
y de la televisión cambió las actitudes sociales, demográficas y culturales de la juventud
española alejándose de los ideales tradicionales que defendían el régimen franquista.
En segundo lugar, en cuanto a la elevación del nivel de vida, se originó una sociedad de
consumo que demandó más productos y más servicios que derivó en una gran importancia de
la publicidad. Toda esa sociedad consumista se vio reflejada en la campaña propagandista de
los “XXV años de la paz”, conmemorando esos 25 años desde el final de la guerra civil. Es
decir, dicha campaña de Franco alegaba que las mejoras eran gracias al franquismo y al fin de
la guerra. A modo de ejemplo se puede observar como la compra de vehículos aumentó de
137.000 en 1948 a 1.707.400 en 1964. Como consecuencia de ambos factores se dió la
aparición de las clases medias.
Tanto el desarrollo económico y cultural ya mencionados, dieron lugar a los deseos de un
cambio político en la ciudadanía. Dicha oposición al régimen se pudo observar
principalmente en el ámbito laboral, estudiantil, regional y eclesiátsico.
Tras transcurrir el periodo conocido como primer franquismo (1939-1959), se inicia la etapa
conocida como segundo franquismo tras llevarse a cabo el Plan de Estabilización de 1959. El
objetivo de dicho plan era liberalizar la economía y conseguir una integración con la
economía europea. A pesar de ello, en los años 60 se produjo un crecimiento económico
impresionante a nivel nacional debido a una serie de factores.
Primeramente, se dió la aparición del fenómeno turístico europeo, debido al buen tiempo y a
la devaluación de la peseta, que supuso un impulso económico muy importante para los
sectores de la construcción, la hostelería y, en general, para la demanda del consumo
derivando todo ello a que España se convirtiera en un país con un gran sector terciario.
En segundo lugar, ante la falta de expectativas de crecimiento en el sector agrario y la crisis
de los años 60, se produjo la apertura de relaciones diplomáticas con Europa produciendo una
oleada de emigrantes hacia países industrializados como Alemania, Francia o Bélgica. A su
vez, debido a que el gobierno facilitó la inversión extranjera y, teniendo en cuenta que las
empresas buscaban una mano de obra barata, un mercado con posibilidades de expansión
ilimitada, se produjo un crecimiento en cuanto a las inversiones extranjeras.
Debido a todo este crecimiento económico y con el fin de poder controlarlo, se crearon tres
Planes de Desarrollo, el de 1964-67, 1968-71 y 1972-75, siendo este último abandonado
debido a la crisis del petróleo de 1973. El crecimiento económico también derivó en un
cambio social y de vida espectacular.
En cuanto a cambios sociales, la emigración del campo a la ciudad hizo crecer las áreas
urbanas derivando en la aparición de cinturones de chabolismo que no se pudieron erradicar
ante la falta de una reforma de los planes urbanísticos. Por otra parte, el impacto del turismo
y de la televisión cambió las actitudes sociales, demográficas y culturales de la juventud
española alejándose de los ideales tradicionales que defendían el régimen franquista.
En segundo lugar, en cuanto a la elevación del nivel de vida, se originó una sociedad de
consumo que demandó más productos y más servicios que derivó en una gran importancia de
la publicidad. Toda esa sociedad consumista se vio reflejada en la campaña propagandista de
los “XXV años de la paz”, conmemorando esos 25 años desde el final de la guerra civil. Es
decir, dicha campaña de Franco alegaba que las mejoras eran gracias al franquismo y al fin de
la guerra. A modo de ejemplo se puede observar como la compra de vehículos aumentó de
137.000 en 1948 a 1.707.400 en 1964. Como consecuencia de ambos factores se dió la
aparición de las clases medias.
Tanto el desarrollo económico y cultural ya mencionados, dieron lugar a los deseos de un
cambio político en la ciudadanía. Dicha oposición al régimen se pudo observar
principalmente en el ámbito laboral, estudiantil, regional y eclesiátsico.
