PREGUNTA 3.
El idealismo platónico es un sistema filosófico en el que se otorga mayor importancia a
aquellas entidades que son aprendidas por la razón frente a las que son aprendidas por los
sentidos. En base al dualismo, afirmamos que hay un orden ontológico (mundo sensible y
mundo inteligible), orden epistemológico (opinión o doxa y ciencia o episteme) y orden
antropológico (cuerpo y alma).
La Teoría de las Ideas de Platón dice que las Ideas tienen las siguientes características: no son
conceptos mentales, sino que tienen una realidad objetiva, y existen independientemente de
mi mente; las Ideas de Platón tienen las mismas características que el Ser de Parménides
(eternas, inmutables, únicas y perfectas); tienen una realidad objetiva y existente (realidad
independiente), las Ideas existen separadas en un mundo superior (mundo inteligible); y las
Ideas son universales.
En cuanto a la ontología, Platón defiende un dualismo que implica dos dimensiones: el mundo
inteligible (es el mundo de las Ideas, realidades inmateriales que solo pueden ser conocidas
por el alma racional) y el mundo sensible (es el mundo de las realidades particulares que
aprendemos por los sentidos y que está en continuo cambio). El mundo material está
compuesto por entidades múltiples y temporales; en cambio, el mundo de las Ideas está
compuesto por entidades únicas, eternas e inmutables.
En cuanto a su epistemología, Platón defiende un dualismo. El mundo sensible es la Doxa
(opinión), donde están los dos primeros grados de conocimiento, que son la Eikasía
(imaginación: sombras) y la Pistis (creencia: objetos). El mundo inteligible es la Episteme
(ciencia), donde se encuentra las dos últimas fases, la Diánoia (razonamiento discursivo:
objetos matemáticos) y la Nóesis (inteligencia: Ideas).
Respecto a la antropología y psicología. Platón defiende el dualismo antropológico, el hombre
es un compuesto de alma y cuerpo. El alma es eterna y su lugar natural es el mundo sensible.
La unión alma y cuerpo es accidental: cuando morimos, el alma deja el cuerpo, y cae en otro
cuerpo al nacer (el cuerpo es la cárcel del alma). Defiende la división tripartita del alma:
- Alma racional: Es inmortal y dirige a las otras dos partes. Está relacionada con el
conocimiento y el mundo inteligible. Queda ubicada en la cabeza. En la alegoría del
carro alado sería el auriga.
- Alma irascible. Es mortal y frente de las pasiones nobles. Representa el valor y queda
ubicada en el pecho. En la alegoría del carro alado sería el corcel blanco.
- Alma concupiscible. Es mortal, responsable de los apetitos y está ubicada en el bajo
vientre. En la alegoría del carro alado sería el corcel negro.
Sobre la ética, Platón dice que cada parte del alma tiene una virtud específica a desarrollar, el
alma racional desarrolla la sabiduría o prudencia (la sabiduría lleva a saber dirigir las partes del
alma y de las clases sociales); el alma irascible desarrolla la valentía o fortaleza (su misión es
someter las pasiones nobles de la razón) y el alma concupiscible su virtud propia es la
moderación (busca la medida en los placeres sensibles).
El idealismo platónico es un sistema filosófico en el que se otorga mayor importancia a
aquellas entidades que son aprendidas por la razón frente a las que son aprendidas por los
sentidos. En base al dualismo, afirmamos que hay un orden ontológico (mundo sensible y
mundo inteligible), orden epistemológico (opinión o doxa y ciencia o episteme) y orden
antropológico (cuerpo y alma).
La Teoría de las Ideas de Platón dice que las Ideas tienen las siguientes características: no son
conceptos mentales, sino que tienen una realidad objetiva, y existen independientemente de
mi mente; las Ideas de Platón tienen las mismas características que el Ser de Parménides
(eternas, inmutables, únicas y perfectas); tienen una realidad objetiva y existente (realidad
independiente), las Ideas existen separadas en un mundo superior (mundo inteligible); y las
Ideas son universales.
En cuanto a la ontología, Platón defiende un dualismo que implica dos dimensiones: el mundo
inteligible (es el mundo de las Ideas, realidades inmateriales que solo pueden ser conocidas
por el alma racional) y el mundo sensible (es el mundo de las realidades particulares que
aprendemos por los sentidos y que está en continuo cambio). El mundo material está
compuesto por entidades múltiples y temporales; en cambio, el mundo de las Ideas está
compuesto por entidades únicas, eternas e inmutables.
En cuanto a su epistemología, Platón defiende un dualismo. El mundo sensible es la Doxa
(opinión), donde están los dos primeros grados de conocimiento, que son la Eikasía
(imaginación: sombras) y la Pistis (creencia: objetos). El mundo inteligible es la Episteme
(ciencia), donde se encuentra las dos últimas fases, la Diánoia (razonamiento discursivo:
objetos matemáticos) y la Nóesis (inteligencia: Ideas).
Respecto a la antropología y psicología. Platón defiende el dualismo antropológico, el hombre
es un compuesto de alma y cuerpo. El alma es eterna y su lugar natural es el mundo sensible.
La unión alma y cuerpo es accidental: cuando morimos, el alma deja el cuerpo, y cae en otro
cuerpo al nacer (el cuerpo es la cárcel del alma). Defiende la división tripartita del alma:
- Alma racional: Es inmortal y dirige a las otras dos partes. Está relacionada con el
conocimiento y el mundo inteligible. Queda ubicada en la cabeza. En la alegoría del
carro alado sería el auriga.
- Alma irascible. Es mortal y frente de las pasiones nobles. Representa el valor y queda
ubicada en el pecho. En la alegoría del carro alado sería el corcel blanco.
- Alma concupiscible. Es mortal, responsable de los apetitos y está ubicada en el bajo
vientre. En la alegoría del carro alado sería el corcel negro.
Sobre la ética, Platón dice que cada parte del alma tiene una virtud específica a desarrollar, el
alma racional desarrolla la sabiduría o prudencia (la sabiduría lleva a saber dirigir las partes del
alma y de las clases sociales); el alma irascible desarrolla la valentía o fortaleza (su misión es
someter las pasiones nobles de la razón) y el alma concupiscible su virtud propia es la
moderación (busca la medida en los placeres sensibles).