La acción exterior
de la Generalitat de
Cataluña
TEMA 3. Relaciones Exteriores de
España
Relaciones Internacionales. Grupo 3.1
Eva Sánchez García
Abril de 2013
,Introducción
Los entes subestatales tienen cada vez mayor proyección y actividad
internacional, convirtiéndose así en un fenómeno global que afecta tanto a
los Estados compuestos como a los unitarios. Esto ha sido considerado por
muchos como una erosión de la soberanía estatal en el ámbito de las
relaciones internacionales. Esta “paradiplomacia” subestatal puede
responder a distintos motivos que van de lo político hasta lo cultural,
pasando por lo económico o identitario. Así, en este mundo globalizado, los
gobiernos regionales y locales han intentado aumentar su papel en las
relaciones exteriores tratando de aprovechar las oportunidades que se les
ofrece.
La mayoría de las actividades llevadas a cabo por estos entes regionales se
han producido en el terreno tradicional de la llamada low politics, siendo
menos visibles a primera vista. No obstante, también ha habido actividades
relacionadas con la high politics, tradicionalmente monopolio de los Estados.
Además existe una distinción entre aquellas actividades centradas en
problemas o cooperaciones con regiones transfronterizas y aquellas que
abarcan áreas más lejanas. Pero más relevante aún es tener en cuenta que
esta acción exterior regional puede servir para dar un mayor peso al propio
Estado o todo lo contrario, es decir, que sirva como autoafirmación y como
una estructura paralela a la política exterior estatal.
Ámbitos de la acción exterior de los Estados
De este modo, para entender las motivaciones a las que responden las
actividades de las distintas regiones, podemos delimitar los ámbitos en que
se produce la acción exterior:
1) Ámbito de predominio estatal o diplomacia clásica. Es el ámbito de
relaciones internacionales tradicionales entre Estados, que tienen que
ver con temas de seguridad, defensa y misiones de pacificación,
tratados, reconocimiento de Estados, representación exterior,
responsabilidad internacional y el ius legationis. La acción exterior
subestatal no ha afectado a este ámbito en ningún país del mundo.
2) Ámbito de acción común y participación autonómica. Es el ámbito de
la participación regional en la elaboración y ejecución de los tratados
internacionales que afectan a sus competencias legislativas o
ejecutivas, la cooperación transfronteriza y la participación en
organismos internacionales en la delegación del Estado o la
participación en conferencias internacionales.
Además también incluye la participación en organismos de promoción
sectorial económica o comercial del Estado, programas de
cooperación o ayuda humanitaria, etc.
1
, Los principios que suelen regir este ámbito son los de integración, unidad
de acción, lealtad institucional y respeto a las competencias internas,
además de la participación y colaboración.
3) Ámbito de complementariedad o actuación paralela (o
paradiplomacia regional). Son todas aquellas actividades que en
función de sus competencias o sus intereses de promoción política
internacional o imagen desarrollan los gobiernos regionales
paralelamente a la acción estatal. Esta actuación se manifiesta en su
participación en asociaciones regionales, acuerdos bilaterales o
multilaterales con otros actores, actividades de promoción cultural o
lingüística, hermanamientos, cooperación científica o tecnológica,
ayuda al desarrollo a países subdesarrollados, recepción de misiones
y autoridades extranjeras, etc.
Estas actividades dependerán de las competencias exteriores de que
gocen las distintas entidades subestatales en los diferentes países. Aquí
pueden surgir tensiones e incluso rivalidad entre regiones de un mismo
país o entre el Gobierno central y las autoridades de una de estas
regiones
4) Ámbito de posible contradicción y conflicto potencial o
protodiplomacia y autoafirmación identitaria. Estas actividades
responden a intereses propios, no compartidos ni compatibles con la
pertenencia al Estado, procedentes de la necesidad de
autoafirmación o legitimación de un proyecto alternativo secesionista
o rupturista del orden estatal establecido. Es decir, existe un
desacuerdo sobre la existente distribución de competencias
sectoriales, con intereses divergentes además de duplicación de
estructuras y el intento de estar representados en organismos
internacionales.
Estos cuatro ámbitos plantean problemas y dilemas diferentes para los
decisores de la política exterior de un Estado. Muchas entidades
subestatales prefieren dejar en manos del Estado la acción exterior o tratan
de cooperar, pero otras prefieren ejercer una acción paralela o incluso
competir con el Estado.
La situación ideal en un país compuesto sería aquella en el que se respete el
primer ámbito y el segundo y el tercero sean cada vez más amplios,
reduciéndose todo lo posible el cuarto, el de conflicto.
Entre los conflictos potenciales que se pueden plantear en la acción exterior
demasiado concentrada en el ámbito de actividad paralela tenemos
problemas de eficacia de la política exterior y de los intereses exteriores
comunes estatales, puesto que se podrían duplicar y se produciría un
deterioro de la imagen externa del país. Además no es raro que se
produzcan problemas en ciertos terrenos, con crispación política y pérdida
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de la Generalitat de
Cataluña
TEMA 3. Relaciones Exteriores de
España
Relaciones Internacionales. Grupo 3.1
Eva Sánchez García
Abril de 2013
,Introducción
Los entes subestatales tienen cada vez mayor proyección y actividad
internacional, convirtiéndose así en un fenómeno global que afecta tanto a
los Estados compuestos como a los unitarios. Esto ha sido considerado por
muchos como una erosión de la soberanía estatal en el ámbito de las
relaciones internacionales. Esta “paradiplomacia” subestatal puede
responder a distintos motivos que van de lo político hasta lo cultural,
pasando por lo económico o identitario. Así, en este mundo globalizado, los
gobiernos regionales y locales han intentado aumentar su papel en las
relaciones exteriores tratando de aprovechar las oportunidades que se les
ofrece.
La mayoría de las actividades llevadas a cabo por estos entes regionales se
han producido en el terreno tradicional de la llamada low politics, siendo
menos visibles a primera vista. No obstante, también ha habido actividades
relacionadas con la high politics, tradicionalmente monopolio de los Estados.
Además existe una distinción entre aquellas actividades centradas en
problemas o cooperaciones con regiones transfronterizas y aquellas que
abarcan áreas más lejanas. Pero más relevante aún es tener en cuenta que
esta acción exterior regional puede servir para dar un mayor peso al propio
Estado o todo lo contrario, es decir, que sirva como autoafirmación y como
una estructura paralela a la política exterior estatal.
Ámbitos de la acción exterior de los Estados
De este modo, para entender las motivaciones a las que responden las
actividades de las distintas regiones, podemos delimitar los ámbitos en que
se produce la acción exterior:
1) Ámbito de predominio estatal o diplomacia clásica. Es el ámbito de
relaciones internacionales tradicionales entre Estados, que tienen que
ver con temas de seguridad, defensa y misiones de pacificación,
tratados, reconocimiento de Estados, representación exterior,
responsabilidad internacional y el ius legationis. La acción exterior
subestatal no ha afectado a este ámbito en ningún país del mundo.
2) Ámbito de acción común y participación autonómica. Es el ámbito de
la participación regional en la elaboración y ejecución de los tratados
internacionales que afectan a sus competencias legislativas o
ejecutivas, la cooperación transfronteriza y la participación en
organismos internacionales en la delegación del Estado o la
participación en conferencias internacionales.
Además también incluye la participación en organismos de promoción
sectorial económica o comercial del Estado, programas de
cooperación o ayuda humanitaria, etc.
1
, Los principios que suelen regir este ámbito son los de integración, unidad
de acción, lealtad institucional y respeto a las competencias internas,
además de la participación y colaboración.
3) Ámbito de complementariedad o actuación paralela (o
paradiplomacia regional). Son todas aquellas actividades que en
función de sus competencias o sus intereses de promoción política
internacional o imagen desarrollan los gobiernos regionales
paralelamente a la acción estatal. Esta actuación se manifiesta en su
participación en asociaciones regionales, acuerdos bilaterales o
multilaterales con otros actores, actividades de promoción cultural o
lingüística, hermanamientos, cooperación científica o tecnológica,
ayuda al desarrollo a países subdesarrollados, recepción de misiones
y autoridades extranjeras, etc.
Estas actividades dependerán de las competencias exteriores de que
gocen las distintas entidades subestatales en los diferentes países. Aquí
pueden surgir tensiones e incluso rivalidad entre regiones de un mismo
país o entre el Gobierno central y las autoridades de una de estas
regiones
4) Ámbito de posible contradicción y conflicto potencial o
protodiplomacia y autoafirmación identitaria. Estas actividades
responden a intereses propios, no compartidos ni compatibles con la
pertenencia al Estado, procedentes de la necesidad de
autoafirmación o legitimación de un proyecto alternativo secesionista
o rupturista del orden estatal establecido. Es decir, existe un
desacuerdo sobre la existente distribución de competencias
sectoriales, con intereses divergentes además de duplicación de
estructuras y el intento de estar representados en organismos
internacionales.
Estos cuatro ámbitos plantean problemas y dilemas diferentes para los
decisores de la política exterior de un Estado. Muchas entidades
subestatales prefieren dejar en manos del Estado la acción exterior o tratan
de cooperar, pero otras prefieren ejercer una acción paralela o incluso
competir con el Estado.
La situación ideal en un país compuesto sería aquella en el que se respete el
primer ámbito y el segundo y el tercero sean cada vez más amplios,
reduciéndose todo lo posible el cuarto, el de conflicto.
Entre los conflictos potenciales que se pueden plantear en la acción exterior
demasiado concentrada en el ámbito de actividad paralela tenemos
problemas de eficacia de la política exterior y de los intereses exteriores
comunes estatales, puesto que se podrían duplicar y se produciría un
deterioro de la imagen externa del país. Además no es raro que se
produzcan problemas en ciertos terrenos, con crispación política y pérdida
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