1. El hialoplasma y el citoesqueleto:
El hialoplasma (citosol):
Es una solución compuesta por agua (85%) y por otros componentes sólidos disueltos o en
suspensión (glúcidos, lípidos, aminoácidos, proteínas, sales minerales…).
El citoesqueleto:
Está formado por una red de filamentos proteicos largos y delgados que se extienden por el
citoplasma. Determina la forma de la célula, sus movimientos y los de sus orgánulos y la
separación de los cromosomas durante la división celular.
Se distinguen tres tipos de filamentos, más o menos conectados entre sí:
○ Filamentos de actina (microfilamentos): son los filamentos más finos y aparecen
como fibras delgadas y flexibles, formadas por polímeros helicoidales de la proteína
actina. Están dispersos en el citoplasma, pero abundan debajo de la membrana
plasmática. Sus funciones son:
- Proporcionan soporte mecánico, determinan la forma de la célula y hacen
posible el movimiento de la superficie celular.
- Sustentan protuberancias permanentes de la célula (microvellosidades del
epitelio intestinal) y sostienen extensiones transitorias (pseudópodos).
- En las células musculares se asocian a los filamentos de miosina para producir
la contracción muscular y participan en la citocinesis.
- Intervienen en el transporte de vesículas de la membrana y orgánulos por el
citoplasma celular.
○ Filamentos intermedios: están formados por muchas fibras de proteínas fibrosas
alargadas. Se llaman así porque su diámetro es intermedio entre los filamentos de
actina y los microtúbulos. Su función principal es permitirles a las células resistir las
tensiones mecánicas que se producen cuando son estiradas.
○ Microtúbulos: están formados por protofilamentos paralelos (tubulina) que dejan una
cavidad central. Son cilindros largos, rectos y huecos. Pueden destruirse rápidamente
en una zona y formarse fácilmente en otra. En las células animales crecen a partir del
centrosoma. Sus funciones son:
- Intervienen en el transporte de vesículas y orgánulos en el interior del
citoplasma.
- Forman parte estructural de los cilios y de los flagelos.
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, - Generan el huso mitótico, que permite la separación de los cromosomas un
poco antes de que la célula se divida.
2. Las estructuras formadas por microtúbulos:
El centrosoma:
Es una estructura que se localiza muy cerca del núcleo en las células animales. Está
constituido por un par de centriolos (diplosoma) orientados perpendicularmente entre sí y
rodeados de un material pericentriolar amorfo. Cada centriolo tiene una formación cilíndrica,
constituida por nueve tripletes de microtúbulos periféricos y ningún microtúbulo central.
Sus funciones son:
○ Organiza los microtúbulos celulares, que crecen desde su material pericentriolar hacia
la periferia de la célula.
○ Participa en la mitosis mediante la formación del huso mitótico (cuyos microtúbulos
se extienden a partir de centrosomas duplicados) y si no tienen centriolos también
forman husos con microtúbulos.
Los centriolos intervienen en el origen y en el crecimiento de los cilios y flagelos (en su base
hay una estructura idéntica al centriolo, denominada corpúsculo basal, desde donde crecen y a
los que se anclan los microtúbulos que forman dichos cilios y flagelos).
Los cilios y flagelos:
Son prolongaciones móviles de la membrana plasmática constituidas por microtúbulos. Se
diferencian en que:
- Los cilios son cortos y numerosos y en la célula todos se mueven de atrás adelante de
manera coordinada. La función de los cilios es mover el líquido que rodea la célula e
impulsarla a través de un fluido.
- Los flagelos son largos y escasos y realizan un movimiento ondulatorio. Son los
responsables de locomoción de varios tipos de protozoos y de los espermatozoides.
Están diseñados para desplazar toda la célula.
3. Los ribosomas y las inclusiones citoplasmáticas:
Los ribosomas:
Son partículas subcelulares sin membrana, con forma de gránulos esféricos, solo visibles con
microscopio electrónico. Están compuestos por proteínas ribosómicas, ARN ribosómico y una
gran cantidad de agua. Están formados por dos subunidades separadas por una grieta
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El hialoplasma (citosol):
Es una solución compuesta por agua (85%) y por otros componentes sólidos disueltos o en
suspensión (glúcidos, lípidos, aminoácidos, proteínas, sales minerales…).
El citoesqueleto:
Está formado por una red de filamentos proteicos largos y delgados que se extienden por el
citoplasma. Determina la forma de la célula, sus movimientos y los de sus orgánulos y la
separación de los cromosomas durante la división celular.
Se distinguen tres tipos de filamentos, más o menos conectados entre sí:
○ Filamentos de actina (microfilamentos): son los filamentos más finos y aparecen
como fibras delgadas y flexibles, formadas por polímeros helicoidales de la proteína
actina. Están dispersos en el citoplasma, pero abundan debajo de la membrana
plasmática. Sus funciones son:
- Proporcionan soporte mecánico, determinan la forma de la célula y hacen
posible el movimiento de la superficie celular.
- Sustentan protuberancias permanentes de la célula (microvellosidades del
epitelio intestinal) y sostienen extensiones transitorias (pseudópodos).
- En las células musculares se asocian a los filamentos de miosina para producir
la contracción muscular y participan en la citocinesis.
- Intervienen en el transporte de vesículas de la membrana y orgánulos por el
citoplasma celular.
○ Filamentos intermedios: están formados por muchas fibras de proteínas fibrosas
alargadas. Se llaman así porque su diámetro es intermedio entre los filamentos de
actina y los microtúbulos. Su función principal es permitirles a las células resistir las
tensiones mecánicas que se producen cuando son estiradas.
○ Microtúbulos: están formados por protofilamentos paralelos (tubulina) que dejan una
cavidad central. Son cilindros largos, rectos y huecos. Pueden destruirse rápidamente
en una zona y formarse fácilmente en otra. En las células animales crecen a partir del
centrosoma. Sus funciones son:
- Intervienen en el transporte de vesículas y orgánulos en el interior del
citoplasma.
- Forman parte estructural de los cilios y de los flagelos.
1
, - Generan el huso mitótico, que permite la separación de los cromosomas un
poco antes de que la célula se divida.
2. Las estructuras formadas por microtúbulos:
El centrosoma:
Es una estructura que se localiza muy cerca del núcleo en las células animales. Está
constituido por un par de centriolos (diplosoma) orientados perpendicularmente entre sí y
rodeados de un material pericentriolar amorfo. Cada centriolo tiene una formación cilíndrica,
constituida por nueve tripletes de microtúbulos periféricos y ningún microtúbulo central.
Sus funciones son:
○ Organiza los microtúbulos celulares, que crecen desde su material pericentriolar hacia
la periferia de la célula.
○ Participa en la mitosis mediante la formación del huso mitótico (cuyos microtúbulos
se extienden a partir de centrosomas duplicados) y si no tienen centriolos también
forman husos con microtúbulos.
Los centriolos intervienen en el origen y en el crecimiento de los cilios y flagelos (en su base
hay una estructura idéntica al centriolo, denominada corpúsculo basal, desde donde crecen y a
los que se anclan los microtúbulos que forman dichos cilios y flagelos).
Los cilios y flagelos:
Son prolongaciones móviles de la membrana plasmática constituidas por microtúbulos. Se
diferencian en que:
- Los cilios son cortos y numerosos y en la célula todos se mueven de atrás adelante de
manera coordinada. La función de los cilios es mover el líquido que rodea la célula e
impulsarla a través de un fluido.
- Los flagelos son largos y escasos y realizan un movimiento ondulatorio. Son los
responsables de locomoción de varios tipos de protozoos y de los espermatozoides.
Están diseñados para desplazar toda la célula.
3. Los ribosomas y las inclusiones citoplasmáticas:
Los ribosomas:
Son partículas subcelulares sin membrana, con forma de gránulos esféricos, solo visibles con
microscopio electrónico. Están compuestos por proteínas ribosómicas, ARN ribosómico y una
gran cantidad de agua. Están formados por dos subunidades separadas por una grieta
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